Es un fertilizante orgánico líquido, preparado con base en materiales orgánicos de origen vegetal y animal, mineralizados y adicionados con un consorcio de microorganismos benéficos, que proporcionan al suelo y a las plantas tanto nutrientes básicos para el desarrollo vegetal, como un efecto preventivo contra plagas y enfermedades.
Con la aplicación del SM-BIOABONO LÍQUIDO a suelos agrícolas se puede sustituir el uso de productos de síntesis química, haciendo la transición de una producción tradicional a una producción orgánica.
Los atributos del producto:
Es un BIOFERTILIZANTE, porque se inocula con bacterias asimbióticas (de vida libre) y hongos simbióticos que incrementan el suministro o disponibilidad de los nutrientes, fijando el nitrógeno atmosférico, solubilizando minerales presentes en el suelo o, mineralizando elementos contenidos en la materia orgánica.
Es un BIOMEJORADORde suelos, porque a partir de la micro carga que contiene, contribuye a mejorar la textura y estructura del suelo favoreciendo la formación de agregados estables, optimizando la porosidad, la retención de humedad, la infiltración del agua y el drenaje, la aireación, y además proporciona a la tierra una menor densidad aparente y compactación. En general, mejora las labores de labranza.
Es un BIOINSECTICIDA, ya que contiene un grupo benéfico de bacterias y hongos competidores de patógenos, que pueden lograr un control biológico contra las plagas que causan daños a los cultivos y, que a la vez, actúan como biodegradadores de la residualidad de agrotóxicos presentes en los suelos.
Es un BIOFUNGICIDA, pues contiene hongos específicos que desarrollan fenómenos de antagonismo logrando un biocontrol de los patógenos del suelo, que son los agentes causantes de enfermedades en los cultivos.
Su carga de microorganismos benéficos es de hasta 2,4 x 109 UFC/g de producto.
Su tasa de reproducción es de hasta 200 veces cada 8 horas.
Son quimio-resistentes.
Actúan como fijadores de nitrógeno al suelo.
Solubilizan el fósforo, potasio y otros minerales.
Colonizan el suelo y se convierten en población dominante.
Generan control y antagonismo a diferentes patógenos del suelo.